Las aguas ibéricas acogen dos especies autóctonas de tortugas de agua o galápagos, el galápago europeo (Emys orbicularis) y el galápago leproso (Mauremys leprosa). En las últimas décadas se ha detectado la aparición en los humedales y ríos de una serie de especies alóctonas de tortuga. El origen de estas poblaciones está mayoritariamente en la liberación voluntaria de tortugas domésticas en los ríos y zonas húmedas. Las tortugas domésticas exóticas jóvenes son muy populares como animales de compañía, pero al llegar a la edad adulta adquieren un tamaño considerable que a menudo se asocia a una creciente agresividad, lo que fuerza a los dueños a la errónea decisión de liberarlas.
Las tortugas exóticas liberadas en las aguas continentales se han aclimatado excepcionalmente y se preproducen a un ritmo muy rápido. La creciente población de especies exóticas está poniendo en peligro a las tortugas autóctonas, especialmente al galápago europeo. Las tortugas exóticas compiten por los diferentes recursos y pueden llegar a desplazar a las especies autóctonas.
La situación en los humedales valencianos es especialmente grave. Las poblaciones de tortugas exóticas, sobretodo la tortuga de mejillas rojas (Trachemys scripta elegans) son alarmantemente altas. Por ello, la Conselleria de Infraestructuras, Teritorio y Medio Ambiente ha llevado a cabo un programa de control de las poblaciones de galápagos exóticos, cofinanciado con fondos LIFE+ Biodiversidad.
Càdec ha participado en este proyecto, participando en la captura de galápagos exóticos, seguimiento de las poblaciones de galápagos autóctonos y en la gestión de la información obtenida.
PERIODO: 2013
Cliente: Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente